A QUÉ SABE...

viernes, 2 de abril de 2010
A qué sabe la mañana
después de haber pasado noches en tu espera

A qué sabe la sombra
cuando días enteros te vistió una luz brillante.

A qué sabe el amor
antes de conocer la sensación de ansiedad de una traición

A qué sabe la tristeza
sin el andar del tiempo de sonrisas

A qué sabe la felicidad
una vez que te alcanza y te quita el aliento

A qué sabe la creación
cuando dios no necesitó bocetos o instructivos para el mundo.

La contrariedad del sabor
solo puede ser percibida una vez que se ha probado y
depende del tiempo, lugar y entorno con que éste
ha sido elaborado.

2 comentarios:

The Butterfly* dijo...

El sabor... a qué te sabe?... un sabor de esos a los que tu te refieres solo puede ser descriptible una vez que hayas probado su sabor contrario. Por ejemplo: A que te sabe la vida, despues de haber estado a punto de morir?, a que te sabe la tristeza despues de haber probado la felicidad por un rato?...
El Blanco no existiría sin su contrario el negro y viceverza...
Hoy a mi me sabe mi vida a... Esperanza*

Anónimo dijo...

Distinguir entre luz y sobra, entre el bien y el mal, tristeza y felicidad, esencialmente es necesario conocer las inclemencias de un mar embravecido y la apacible quietud de las aguas de los lagos, trasnochar en el polo sur y despertar en el polo norte, es saborear lo dulce cuando la vida nos sonríe, es apaciguar la frustración de la derrota, es curar las heridas cuando el amor se agota, todo es pasajero hasta la vida misma, hoy se pudiera estar en lo mas profundo del abismo y mañana en lo más alto del firmamento, lo bueno o malo, es que todo es así, pasajero, todo es por un momento.
Estimado felicidades y gracias por compartir tus conceptos.
Martín Toledo.

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